Viajar con tu perro, los mejores consejos en Mascoboutique
Sin darnos casi ni cuenta ya estamos en verano. En unas semanas estaremos de vacaciones: vivir sin reloj, paseos por la playa, tardes interminables con los amigos... Pero, ¿os imagináis pasar las vacaciones con vuestro perro? ¡Os aseguramos que con un poco de planificación y ganas no es una misión imposible!
Decimos esto porque en Mascoboutique en estos días no paramos de recibir a personas que quieren llevarselo de vacaciones o hacer escapadas con perros, pero tienen muchas dudas sobre cómo hacer el viaje. Os reconocemos que de todos los países, viajar con perro en España no es el más sencillo, porque la información está dispersa y porque hay algunas normas o limitaciones que, en nuestra opinión, no tienen sentido. Así que normal que seáis un mar de dudas y podáis llegar incluso a descartar la opción.
A continuación, os resolvemos las dudas más comunes que nos plantean los clientes sobre viajar con mascotas y aquellos aspectos que nos parece fundamental conocer antes de decidirse a llevar a tu perro contigo en las vacaciones.
Viajar en tren con perro
En España, viajar en tren con perro debería ser lo más cómodo dada la red ferroviaria que tenemos. Sin embargo, al leer la normativa de perros de RENFE en su web, da la impresión de que lo último que quieren es que lleves a tu perro a bordo. Para que os hagáis a la idea, estas son las normas más importantes que tendrás que tener en cuenta si quieres viajar en tren con tu perro:
- El perro junto con el transportín no podrá pesar más de 10 kg. Por lo tanto, si tu perro pesa más de 10 kg, el tren no puede ser tu opción de transporte ya que RENFE no proporciona una alternativa.
- Las medidas del trasportín no podrán exceder los 60 x 35 x 35 cm. Además, deberá tratarse de un trasportín cerrado, es decir, que se pueda cerrar por completo para que el perro no pueda asomar la cabeza.
- Le tendrás que comprar un billete al perro, pero eso no le otorga un lugar específico para él dentro del tren. Literalmente, RENFE indica en su web “los animales viajarán con un billete sin ocupar plaza”.
Como no tienen plaza, RENFE señala que el perro tendrá que ir a tus pies en un lugar discreto de tal forma que interfiera lo menos posible con el resto de los clientes. Y, para completar la información, la normativa añade que cualquier otro viajero podrá oponerse a que lleves a tu perro contigo, en cuyo caso, “el personal de a bordo buscará la alternativa más favorable para poder continuar el viaje en otro lugar del tren y si no es posible se le ofrecerá al cliente la posibilidad de viajar en otro tren o el reintegro de su billete”.
Como veis, RENFE lo pone facilísimo: tienes que comprarle un billete al perro, pero eso no le da derecho a una plaza. Por tanto, tienes que meterlo entre tus pies dentro de su transportín sin que pueda ni sacar la cabeza en todo el viaje. Además, el perro tiene que ser “discreto” y no agobiarse por la situación ya que, si un amable pasajero decide quejarse, puedes acabar de patitas en la calle. Por favor, todos conmigo, ¡un hurra por RENFE!
Sólo se admite un animal por viajero. Así que, si tienes dos perros y viajas solo, el tren no puede ser tu opción.
Después de leer lo anterior, debéis de estar pensando que antes vais andando que intentar meter a vuestro perro en un tren. Sin embargo, debemos reconocer que la experiencia de nuestros clientes no es tan mala. Con carácter general, el personal de RENFE no suele ser muy estricto con las medidas del transportín siempre que sean parecidas a la que establece la normativa. Además, muchos nos han contado que, una vez en el vagón, todo han sido facilidades y han podido incluso sacar al perro del transportín para que fuera más tranquilo. Eso sí, hay tres aspectos en lo que sí nos han comentado que son intransigentes:
- El peso: el perro junto con el transportín no puede pesar más de 10 kg.
- El transportín: necesariamente el perro debe ir en un transportín cerrado.
- El número de animales: un viajero no puede ir con más de un animal.
Viajar con perro en avión
Para viajar en avión con tu perro lo primero que debes de conocer es la normativa que establece la aerolínea con la que quieres viajar. Sí que existen ciertas normas comunes, pero cada aerolínea tiene sus propias reglas, pudiendo incluso, prohibir viajar con perro. También pueden existir limitaciones en función del país de destino que elijas. Por lo tanto, antes de comprarte el billete, infórmate y elige bien la aerolínea con la que vas a viajar y el destino. Las normas que se repiten con más frecuencia son las siguientes:
- Siempre tendrás que pagar un suplemento para llevar a tu perro contigo. El precio variará en función del destino.
- Todas las aerolíneas establecen un peso máximo por encima del cual el perro deberá de viajar en bodega. Por ejemplo, Iberia y AirEuropa permiten que el perro viaje contigo en cabina si su peso junto con el del transportín es igual o inferior a 8 kg.
- Si el perro viaja contigo en cabina, el transportín tendrá que ser cerrado y con ventilación. Pero ten en cuenta que las dimensiones del transportín varían de una aerolínea a otra. Por ejemplo, Iberia establece unas medidas máximas de 45 x 35 x 25 cm, mientras que en AirEuropa son de 55 x 35 x 25 cm. Como veis son diferencias pequeñas, pero muy importantes ya que en este sentido las aerolíneas suelen ser muy estrictas por motivos de seguridad durante el vuelo.
- Si, por el contrario, si vas a viajar con perros de más de 10kg, el perro deberá ir en bodega por su peso, el transportín tendrá que ser rígido y lo suficientemente resistente como para que no se pueda abrir durante el vuelo. En este caso, pueden exigir que sean transportines homologados por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ya que el perro, al fin y al cabo, irá solo en bodega y es muy importante por la seguridad de todos que no pueda escaparse de su transportín en mitad del vuelo.
- Muchas aerolíneas tienen restricciones en caso de que el perro sea braquicéfalo, es decir, con el morro chato como son el boxer, bulldog inglés, bulldog francés, carlino, shih tzu… Lo habitual es que les permitan viajar en cabina contigo, pero no en bodega.
- Por último, pueden existir restricciones en función del destino ya que hay países que imponen limitaciones o unos requisitos extra (ciertas vacunas, certificados oficiales…) para aceptar animales en su territorio.
Por nuestra parte, queremos hablaros un poco más del transportín o bolso de viaje en el caso de que vuestro perro pueda viajar en cabina o de que os animéis a viajar en tren con él. Existe la creencia de que el transportín tiene que ser el clásico de plástico duro, pero esto no es cierto. Lo que exigen las aerolíneas y RENFE es que el transportín se pueda cerrar completamente y que tenga ventilación para que el perro no sufra. Por lo tanto, los transportines de tela y semirígidos son perfectos para este tipo de viajes. Ten en cuenta que el perro tendrá que ir contigo a tus pies, así que, si el transportín tuviera que ser de plástico rígido, ¡sería bastante difícil que entrarais los dos!
Viajar con perro en coche
Bueno y después de tantas normas y limitaciones, ahora vamos a las buenas noticias y es que viajar con un perro en coche por España es de lo más cómodo. El coche es desde luego el medio de transporte más sencillo si queremos disfrutar de vacaciones con perros. El Reglamento General de Circulación lo único que establece es que “el conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción”. Es decir que, si el perro está bien sujeto y no puede llegar al conductor, es más que suficiente para poder llevarlo contigo en el coche sin ser multado.
Además de para evitar la multa, es importante que el perro esté bien sujeto por su seguridad y por la nuestra. Desde Mascoboutique, recomendamos que el perro vaya en el asiento trasero con un sistema de retención que le agarre por el cuerpo y no por el cuello.
En nuestra opinión, lo más cómodo es utilizar una correa de las que se enganchan al cinturón de seguridad y ponerle al perro un arnés tipo chaleco. Así, en caso de un frenazo o accidente, el perro estará bien agarrado y el tirón se repartirá por todo el cuerpo, no solo por el cuello. Al margen de la sujeción, dejamos algunos consejos más para viajar en coche con perro:
- Si el viaje no es muy largo, no le des de comer hasta que lleguéis al destino para evitar mareos.
- Lleva contigo suficiente agua y un bebedero de viaje para poder darle de beber en las paradas. Ten en cuenta que es probable que no puedas meterlo en las gasolineras o restaurantes de carretera que encuentres en el camino así que el bebedero de viaje puede ser fundamental.
- No pongas la música muy alta y trata de llevar alguno de sus juguetes o mantitas. Así estará más tranquilo.
- Haz más paradas de lo normal para que el perro pueda estirar las piernas, hacer sus necesidades y beber agua.
Medidas transportín para perros
Como has visto, no hay unas medidas estándar para escoger un bolso de viaje universal. Cada compañía (en el caso de las aerolíneas) tiene unas normas específicas que tampoco concuerdan al 100% con RENFE. Por supuesto, hablamos en el supuesto de que quieras viajar con tu perro en cabina contigo, un privilegio que - de momento - solo está reservado a los perros toy o mini de hasta 10 Kg.
Si por viajes de larga duración u otros motivos, necesitas llevar a tu perro mediano o grande contigo, deberás resignarte a que viaje en la bodega. Por supuesto, ahí están obligados a usar transportines homologados que cumplan la normativa IATA, más estandarizada, pero cuyo tamaño dependerá de las medidas de tu perro y las restricciones o condiciones del modelo de avión (y no tanto de la compañía).
Si es tu caso, te animamos a informarte a fondo sobre esta normativa y las opciones que tienes para desplazar a tu peludo contigo.
Qué hacer para que el perro esté tranquilo durante el viaje
Ya para terminar, queremos hablar de un tema que os preocupa mucho y es cómo evitar que el perro se ponga nervioso durante el viaje. Lo ideal es acostumbrarlos desde cachorros a viajar y a estar metidos en su transportín de modo que lo vean como una actividad normal. Cuando son pequeños es el momento de educarlos en las actividades cotidianas para que de adultos no les estresen o asusten.
Así que, incluso aunque no vayas a hacer viajes en su etapa de cachorro, te recomendamos que tengas un transportín cerrado desde pequeño y que pasees con él metido en su trasportín. Es una gozada ver cómo algunos pequeños ven el transportín y se vuelven como locos de contentos al asociarlo a paseos con mamá por la ciudad.
Si tu perro ya es adulto y no está acostumbrado a ir en transportín cerrado, te recomendamos que, unas semanas antes del viaje, tengas ya el transportín y empieces a acostumbrarlo a ir en él. El objetivo es que se acostumbre a estar metido en el transportín de forma tranquila sin que lo vea como un castigo. Si dejamos para el último minuto la compra del transportín y el día del viaje es la primera vez que lo metes en él, es muy posible que el viaje sea una pesadilla tanto para ti como para el perro.
Finalmente, si ya lo has intentando, y tu perro no se acostumbra al transportín o le da miedo viajar, te recomendamos que hables con tu veterinario ya que existe medicación para que vaya más tranquilo. Pero insistimos, esto debería ser el último recurso y siempre dándole la dosis recomendada por el veterinario.
¿Os hemos convencido de viajar con vuestro perro? ¿tenéis alguna duda más en la que os podemos ayudar? ¿Queréis compartir con nosotros alguna experiencia de viaje con vuestro perro? ¡Nos encantará leer vuestros comentarios!